Haz más sencilla la limpieza de tus ventanas.

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¿No te ha pasado que después de limpiar tus ventanas quedan horriblemente manchadas? 

¡A todos nos ha pasado y es súper molesto cuando pasa! Pero no te preocupes, te traemos algunos tips para que te queden como todo un profesional. 

El día que decidas realizar la limpieza, elige un día soleado, ¿la razón? Entre más soleado esté el día, más rápido se secarán y así no te quedarán manchas desagradables en tus cristales, si limpias el día correcto, ya no te tendrás que preocupar porque se ensucian rápido y además dejarlos manchados. 

Aquí te dejamos algunos consejos naturales que pueden ser tu aliado: 

• Vinagre: 

Puede ser uno de tus mejores aliados, sabemos que su olor no es tan agradable, pero eso lo olvidarás cuando vean qué relucientes dejará tus ventanas. Mezcla media taza de vinagre con media taza de agua caliente, ¡listo! Ya tienes tu mezcla, ahora con una esponja limpia y seca. 

• Bicarbonato: 

¿Has escuchado que es milagroso? ¡Pues llegó para salvarte! El bicarbonato es muy útil y es multiusos, lo único que tendrás que hacer es combinar una taza de agua caliente con 3 cucharadas de bicarbonato y revolver. Limpia tus vidrios con una esponja humedecida en la mezcla y seca. 

Recomendaciones: para secar tus ventanas y no te queden rayadas con marcas y residuos, te recomendamos utilizar nuestras Toallas de papel Regio® Advanced, porque además de ser súper resistentes, te limpiarán a la primera.